La provincia de Corrientes se encuentra otra vez bajo el impacto de las inclemencias meteorológicas, con lluvias intensas y crecidas de ríos que han afectado tanto a las comunidades locales como al sector productivo, especialmente al agrícola y ganadero.
Miguel Güenaga, presidente de las Asociaciones Rurales de Corrientes, compartió detalles del estado de situación de diferentes zonas, tanto agrícolas como ganaderas. Consideró que “las lluvias pronosticadas inicialmente en torno a 80 mm resultaron en un desmesurado registro de 500 mm”. Esta situación provocó crecientes en ríos y arroyos, y afectó a las localidades de Goya, Perugorría, Bella Vista y Mercedes, donde miles de hectáreas resultaron inundadas.
El dirigente productor explicó que “la problemática comenzó con las lluvias en las zonas de Perugorría y Goya, desencadenando una rápida crecida de los ríos y arroyos. Esto impidió a los productores retirar el ganado a tiempo, dejándolos sin pasto para alimentarse. Ante la urgencia, algunos ganaderos pudieron trasladar sus animales a zonas más altas o incluso a las rutas”.
En relación con las previsiones meteorológicas, Güenaga destacó que “la magnitud de las crecidas se asemeja a la ocurrida en 1998, cuando la región experimentó inundaciones devastadoras”. En cuanto al manejo del ganado, señaló que “se ha priorizado la evacuación de la hacienda adulta, mientras que los animales más jóvenes han sido transportados en botes o lanchas. A pesar de los esfuerzos, se han registrado pérdidas de cabezas de ganado, especialmente entre los terneros más vulnerables”.
“El productor ganadero, como el arrocero, viene cascoteado por episodios climáticos. Quizás hoy, podemos ver que el animal adulto, se pudo sacar a zonas más altas, pero el ternero recién nacido, se pierde, ya que se termina ahogando”, lamentó el referente del campo en diálogo con la prensa nacional.
En este sentido, el titular de la ARC se refirió a la asistencia a los productores y remarcó las dificultades logísticas que atraviesan debido a los caminos inundados y a los daños de infraestructura.
En tanto, el Gastón Giqueaux, presidente de la Sociedad Rural de Goya, alertó que “hay vacas que parieron en el agua, terneros que se ahogan. Es una situación crítica. Hay pronósticos de lluvias importantes hasta el miércoles próximo”, manifestó en comunicación con Infobae.
Corrientes es centro de desastres naturales, con una secuencia de eventos climáticos adversos en los últimos años. Desde 2021, la provincia experimentó un déficit hídrico, sequías, incendios y ahora, en 2024, se enfrenta a inundaciones provocadas por la crecida del Paraná y lluvias excepcionales.
El ministro de la Producción de Corrientes, Claudio Anselmo, coincidió con los ruralistas al reportar la magnitud del impacto de las lluvias en la zona centro de la provincia en campos ganaderos, que provocaron la pérdida de animales y dañaron cultivos de arroz y tabaco.
El funcionario detalló en una entrevista con CNN que “se llevan a cabo operativos de monitoreo, con la evacuación de alrededor de 400 personas de las zonas rurales. Además, se trabaja activamente en el traslado del ganado a zonas más elevadas como medida preventiva”.
El ministro también destacó que “si bien el pico de inundación ya pasó en la zona de cultivos de arroz, ubicada en inmediaciones de la ruta 123, la situación es crítica en la ruta nacional 12, donde el nivel del agua recientemente alcanzó su punto más alto, lo que llevó al corte de esa vía terrestre en dos tramos”.
Ante este panorama, la cartera productiva afirmó que “las autoridades locales se encuentran trabajando en medidas de ayuda, incluyendo asistencia crediticia y apoyo para la recuperación del sector”.
El ministro explicó que “el fisco provincial experimentó un golpe financiero debido a la última sequía e incendios, lo que derivó en la no recaudación de impuestos como el inmobiliario rural”.
“Esos fondos no recaudados, que se destinan a mejorar caminos y llevar a cabo acciones sanitarias para la protección animal y vegetal, representan un desafío adicional para la capacidad financiera del gobierno provincial”.
Anselmo hizo hincapié en la necesidad de implementar estrategias efectivas y rápidas para ofrecer apoyo a los afectados. En cuanto a asistencia de Nación, el ministro señaló que el 5 de enero mantuvo un encuentro con el secretario de Agricultura nacional, Fernando Vilella, a fin de coordinar la implementación en el corto plazo de mecanismos contemplados en la Ley de Emergencia Agropecuaria.
“El proceso burocrático hace que los fondos recién lleguen dentro de muchos meses, y cuando los daños son importantes, hay que actuar lo más rápido posible”, aseveró Anselmo.